El diálogo
Se debe entender que un dialogo es un INTERCAMBIO de opiniones, ideas y puntos de vista respecto de la situación que se discute. De esta manera un interrogatorio no es dialogo, así como tampoco lo es una entrevista.
Variables fundamentales del dialogo para solución de conflictos:
A)Disposición a escuchar.
Para conocer y comprender a los demás hay que desarrollar la habilidad de escuchar. Escuchar no es solo procesar sonidos o la voz de alguien, eso sería simplemente oír.Escuchar implica interpretar, recibir lo que el otro nos quiere decir, disponernos a esa persona para apreciar sus puntos de vista, sus reacciones, sus emociones.
Hoy más que nunca debemos ejercitar ese don, para acercarnos a nuestros hijos, para comprender a nuestros colegas, para comprender las razones que mueven a las personas a actuar de una u otra manera. No es fácil escuchar, ya que hemos crecido en una sociedad que premia al que domina y generalmente el dominio se ejerce a través de la palabra. Para muchos el hablar les produce más placer que escuchar.
Sin embargo, cuando se trata de resolver conflictos, el arte de escuchar permite conocer los puntos de vista de los interlocutores y establecer empatía. En muchos lugares, muchas personas tienen la necesidad de ser escuchados, para expresar sus emociones, o simplemente para escapar de su soledad.
B)Ausencia del enojo.
Cuando una persona se encuentra enojada la claridad de su pensamiento disminuye. A mayor enojo menor comprensión de la situación. Por tanto, si el dialogo se busca para resolver un conflicto, las personas que están dialogando no deben estar enojadas. No se trata de que si el enojo se muestras o no se muestra, se trata de no sentir enojo.
Una persona enojada experimenta el impulso de hacerse oír, de querer imponer su punto de vista y se mostrara con una rigidez para escuchar y comprender el punto de vista de la otra parte. La otra persona, por su parte, no esta escuchando palabras, ni las ideas transmitidas en esas palabras; básicamente lo esta escuchando es el enojo de la primera persona. De esta manera la posibilidad de un entendimiento entre las personas enfrentadas en el conflicto se bloquea.
Por tanto, para lograr un adecuado uso del dialogo, las personas deben despojarse de sentimientos inadecuados, como el enojo, para poder establecer una negociación que permita resolver el conflicto y obtener resultados funcionales.
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